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La resistencia



Una humilde madre es ahora la que encabeza el asalto, la que corta el viento como una espada. Los escuadrones la ven encarar y emocionados descienden en picada con lágrimas en los ojos. A unos veinte metros de altura ella endereza el morro del reactor y lo pone en vuelo rasante. En una aceleración temeraria se vuelve la punta de lanza. La sigue una oleada de cazas que en post combustión levanta una crin de hielo y piedra.

Se rumorea que le dicen La venganza de los pueblos

Una voz astillada en la radio.

¡Defiendan la ciudad!


(Texto del relato Destino helado, de Víctor Grippoli y Cristian Cano) 

conseguilo en www.lektu.com 

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A cuatro manos - Ana Caliyuri y Cristian Cano

No vine a escribir grandes textos, ni grandiosas historias, ni siquiera pequeños relatos. Solo vine a despertar la noche para que revele las luces que iluminan las palabras. Después de todo, alcanza con la confianza en las alas y un poco de brisa madura. Alcanza con dejarse a la deriva y esperar a las musas, a los barcos de la mañana, a los trenes que llegan y se van, con todo lo nuestro se van. Vine a develar, vine a decir. A encontrar, a querer hacer. Alcanza con la confianza.

Mensaje en la botella

Llegado el momento vas a sentir nuestra fuerza. Te hemos vencido en otras galaxias, la Tierra está destinada a ser otro planeta recuperado. Ustedes ya no tienen cabida bajo este Sol. Ahora todo el mundo los puede ver.

Grafito al diamante

Escribir es alejarse, es huir, tomar un avión hacia cualquier lado. Vos sabés de eso, te leo y quedo  en otro espacio. Tiene que ver con la tierra, con el aroma y el valor de tus huesos, ceniza de lápiz, una mina con la que te sale tremenda historia. Sabemos cómo es, papel en mano abordamos enojados y empujamos la valija que revienta de libros, estalla de libros. Ansia por dibujar destino, por volver a manchar cuadernos en la primaria. Te gusta pintar y salir de la raya. Así escribís, nos arrastrás bien lejos hacia donde la soledad no da alcance. *L. Velázquez  *C. Cano