Lejos diviso tu semblante, renaciente entre tanta oscuridad. Emprendo el viaje hacia el lucero que atrapa mis sentidos, haciéndome cómplice del eterno silencio, donde las palabras emiten sus voces... Llamándote. Más nos exijo, más me apabulla el mundo. Tu brazo rama llega hasta mí cadencia ventosa. Este mundo me atrapa. Sos feliz. Yo ando con el cielo entre los dedos.
Escribir es alejarse, es huir, tomar un avión hacia cualquier lado. Vos sabés de eso, te leo y quedo en otro espacio. Tiene que ver con la tierra, con el aroma y el valor de tus huesos, ceniza de lápiz, una mina con la que te sale tremenda historia. Sabemos cómo es, papel en mano abordamos enojados y empujamos la valija que revienta de libros, estalla de libros. Ansia por dibujar destino, por volver a manchar cuadernos en la primaria. Te gusta pintar y salir de la raya. Así escribís, nos arrastrás bien lejos hacia donde la soledad no da alcance. *L. Velázquez *C. Cano
Que hermoso! !!! Emociona....
ResponderEliminar¡Ah, Blanca! ¡Qué lindo tenerte acá! El libro con tu portada se está en imprenta, en Capital :)
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